Todo en 90 días: Libby podría estar engañándose a sí misma sobre la verdadera naturaleza de Andrei (él obtuvo la ciudadanía estadounidense a través de ella, pero vivir con él podría ser un desafío)

Todo en 90 días: Libby podría estar engañándose a sí misma sobre la verdadera naturaleza de Andrei (él obtuvo la ciudadanía estadounidense a través de ella, pero vivir con él podría ser un desafío)

Libby Potthast parece ver su relación con Andrei Castravet a través de un optimismo que a veces puede parecer poco realista. Si bien su deseo de ver lo mejor en su marido es encomiable, plantea inquietudes sobre la frecuencia con la que puede pasar por alto su comportamiento inapropiado. En el delicado equilibrio del amor, muchas parejas deben navegar por la delgada línea entre el compromiso saludable y la sumisión excesiva. Aunque Libby encarna la bondad y ha demostrado una fortaleza significativa, su dependencia del apoyo familiar para la estabilidad financiera y el empleo puede obstaculizar su independencia, particularmente en su relación con Andrei.

Depende de mí

La diferencia en la ropa que usa

En mi caso, el cambio ha llegado.

Ella está bajo mi control (Under My Thumb, The Rolling Stones)

Curiosamente, a pesar de la inquietante dinámica, creo sinceramente que Andrei alberga sentimientos por Libby. Sin embargo, su temperamento volátil a menudo conduce a reacciones explosivas que pueden afectarla emocionalmente de manera significativa. Este escenario evoca los temas del clásico de los Rolling Stones “Under My Thumb”, donde la narrativa revela una dinámica poco saludable de control sobre una pareja que antes era independiente. Plantea la pregunta: ¿realmente queremos que Libby soporte una atmósfera de rudeza y dominio masculino, como se muestra en sus interacciones en pantalla?

¿Andréi simplemente pretende ser reformado?

Potencialmente cruel y grosero a puerta cerrada

A lo largo de los años, Andrei ha dado, sin quererlo, una clase magistral para los hombres sobre cómo no tratar a las mujeres. Desde órdenes duras como “escucha doble” hasta el uso de lenguaje grosero en su lengua materna, e incluso el alejamiento de Libby de su familia (a la que llama despectivamente una “secta”), su comportamiento cruza límites incómodos, especialmente cuando se desarrolla frente a las cámaras. Esto es bastante alarmante.

Es evidente que Andrei es lo suficientemente astuto como para entender que su notoriedad depende de sus payasadas dramáticas. Su tendencia a la mala conducta se ha convertido en su marca registrada, una consecuencia de intensos conflictos familiares con el hermano de Libby, Charlie, y de momentos degradantes que involucran al padre de ella, Chuck Potthast, a quien a menudo parece considerar un recurso financiero. La atención y la influencia que obtiene de estas acciones probablemente influyan en su percepción de lo apropiadas que son.

Actualmente, Andrei disfruta de una vida cómoda en Estados Unidos: hace ejercicio con regularidad, se va de vacaciones y captura momentos familiares “perfectamente felices” con Libby y sus hijos para que el público los vea. Si bien tener ego es algo común, el problema más acuciante es el posible trastorno emocional que esto puede causarle a Libby. Ella merece ser tratada como una compañera igual en lugar de sentirse menospreciada en su propia vida.

Libby es, sin duda, una persona resiliente. Como madre de dos hijos, se ocupa de varios roles, desde criar a sus hijos y grabar contenido educativo hasta desarrollar una carrera en la administración de propiedades y establecerse como estrella de reality shows. Es mucho más que la esposa de Andrei, y es esencial que no se pierda en su empeño de cumplir sus expectativas. A pesar de su profundo amor por él, pueden aparecer momentos de duda sobre sí misma, lo que provoca sentimientos de vacío, una preocupación que a menudo afecta a quienes tienen relaciones con parejas difíciles.

Lo que agrava el problema son los cambios de humor de Andrei. Cuando está bien, parece ser un compañero increíblemente cariñoso y devoto. Sin embargo, en tiempos difíciles, su temperamento puede volverse agrio y desencadenar comentarios crueles de los que Libby puede ser testigo mucho después de que las discusiones se calmen. Esta montaña rusa emocional de “cielo e infierno” puede ser agotadora y dañina, y desarrollar un ciclo que podría tener repercusiones emocionales significativas con el tiempo.

Fuente e imágenes

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *