Reseña de Carry-On: Taron Egerton brilla en un thriller de Netflix que se vuelve más disfrutable con su simplicidad

Reseña de Carry-On: Taron Egerton brilla en un thriller de Netflix que se vuelve más disfrutable con su simplicidad

Durante los primeros momentos de Carry-On , noté que mi atención se desviaba de la narrativa que se estaba desarrollando. Esta distracción se destacó particularmente cuando estaba mirando atentamente para una reseña. Siempre es digno de mención cuando una película lucha por mantener la atención del espectador y, en este caso, mi mente no estaba divagando debido a pensamientos mundanos sobre mi día o tareas futuras. En cambio, estaba preocupado por los aspectos meta de la película en sí, en lugar de su trama.

Mi curiosidad se inclinó hacia las decisiones estructurales de la película más que hacia los giros de la trama. Me encontré contemplando por qué una historia como esta se presentó de esa manera y con esas elecciones de reparto. Durante gran parte de su metraje, Carry-On intenta un tono serio, que parecía más una audición para la versatilidad de Taron Egerton, en cuanto al tipo de personaje que puede interpretar. En algunos niveles, encontré esto intrigante, ya que preparó el escenario para lo que finalmente se convierte en un disfrute bastante caótico, a pesar de que la película a menudo revela más sobre las limitaciones del personaje de Egerton que sobre sus fortalezas.

Carry-On: Una premisa de suspense desperdiciada

Trama sólida pero falta profundidad en los personajes

Ethan Kopek, interpretado por Egerton, es un oficial de la TSA que se siente estancado en su vida. En Nochebuena, recibe una noticia que le cambiará la vida sobre su inminente paternidad de parte de su pareja, Nora (Sofia Carson), que trabaja en el aeropuerto de Los Ángeles. Animado por Nora a reavivar su pasión, Ethan decide que este es el día para volver a comprometerse con su carrera. Sin embargo, esta elección rápidamente demuestra ser un error.

Las complicaciones surgen cuando un criminal a sueldo, interpretado por Jason Bateman, planea pasar de contrabando un paquete a través de la seguridad del aeropuerto. Ethan se ve envuelto inadvertidamente en este peligroso plan después de descubrir que está en una situación perfecta para ser el objetivo. Equipado con un auricular, Ethan se ve inmerso en una situación de alto riesgo, donde el enigmático viajero le da instrucciones siniestras: deja pasar una maleta y la vida de Nora pende de un hilo.

Si bien la trama tiene potencial para generar intriga, la ejecución me pareció deficiente. Mi desconexión no se debió a los giros y complejidades de la narrativa, sino más bien a una ausencia fundamental de una inversión genuina en los personajes. Me sentí desconectado de sus viajes emocionales, incapaz de captar su verdadera esencia como algo más que meros recursos de la trama.

Recopilamos información sobre el Viajero desde el principio; en el prólogo, adquiere el contenido de la maleta de formidables gánsteres rusos, para eliminarlos poco después. Su equipo incluye al menos otro agente, conocido como el Vigilante Misterioso (Theo Rossi), que facilita los aspectos operativos desde las sombras. Con un plan bien estructurado y la capacidad de adaptarse rápidamente, prometen una confrontación llena de tensión.

Jason Bateman revisando su auricular en el equipaje de mano

La dinámica del gato y el ratón que se crea para generar tensión termina resultando aburrida. A pesar de una trama estructurada, a Carry-On le falta sustancia en lo que respecta a sus personajes y sus viajes más largos. Este desafortunado descuido es evidente si se lo compara con otros thrillers contemporáneos, como Juror No. 2, que aborda con destreza los dilemas éticos y muestra las ramificaciones morales de decisiones aparentemente simples, como el contenido de la misteriosa bolsa.

Una película protagonizada por una estrella que no entiende a su protagonista

El potencial no desarrollado de Egerton hasta la mitad

Taron Egerton corriendo por el aeropuerto en equipaje de mano

A falta de una trama sólida, la película depende en gran medida de su reparto para provocar respuestas emocionales en el público. Mientras la veía, me pregunté por qué la actuación de Egerton no me había impresionado como esperaba. Parece que este papel no se ajusta a sus puntos fuertes, subrayados por una broma alegre con temática navideña que solo resaltaba sus raíces británicas.

Curiosamente, a medida que la película se vuelve absurda, mi disfrute aumenta; cuando el ritmo aumenta, también lo hace mi diversión.

Además, los paralelismos con papeles icónicos como el de Bruce Willis en Duro de matar parecen fuertes, pero Egerton no encaja del todo en el molde, ya que carece del atractivo de hombre común y corriente combinado con una historia de fondo convincente que exigen esos papeles. Carry-On intenta posicionarlo de manera similar a Matt Damon, pero el resultado no se manifiesta del todo como se esperaba. A lo largo de gran parte de la película, Ethan parece estar a la defensiva, asediado por las circunstancias.

Las cosas dan un giro cuando Ethan finalmente se levanta de su silla; en este punto, la película encuentra su ritmo. La trama se complica a medida que varias narrativas chocan de manera hilarante, en particular con la introducción del detective interpretado por Danielle Deadwyler que rastrea los vínculos con los gánsteres fallecidos. El enfoque cambia del desarrollo del personaje a la exploración de hasta qué punto la trama puede estirar la verosimilitud, lo que conduce a momentos cada vez más entretenidos. Mi disfrute aumentó a la par con el absurdo de la película.

Danielle Deadwyler con una mirada contemplativa en Carry-On

Este punto marca el surgimiento del potencial de Egerton, que recuerda al dinámico personaje de acción de Tom Cruise, en particular cuando Ethan utiliza su experiencia atlética para sortear situaciones de alto riesgo. La energía frenética de un héroe de acción que corre contra el tiempo mejora la experiencia visual. Egerton encarna una atractiva combinación de talento y empatía, lo que sugiere un futuro emocionante en papeles de acción. Lamentablemente, Carry-On carece de coherencia a la hora de aprovechar este potencial, lo que deja a los espectadores con una impresión mixta.

Aunque me fui con una apreciación de las capacidades de Egerton, especialmente después de notar cuán cautivador es Deadwyler, sigue siendo decepcionante que esta no fuera la película para mostrar su talento adecuadamente.

Carry-On comenzó a transmitirse en Netflix el 13 de diciembre. Este thriller tiene una duración de 119 minutos y tiene una clasificación PG-13 por violencia intensa, algunas imágenes sangrientas y lenguaje sugerente.

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