Advertencia: contiene SPOILERS de All-New Venom #1
Las secuelas de la Guerra de Venom han dejado un gran revuelo a su paso. Eddie Brock, más conocido como Venom, ha desaparecido, dejando a su hijo, Dylan Brock, solo y sin un simbionte. Este último abandono se suma a las muchas dificultades que Dylan ha enfrentado en su joven vida. Ahora, con su padre desaparecido y viendo a Venom paseando alegremente por Nueva York con un nuevo anfitrión, Dylan se enfrenta a sentimientos de rabia y rechazo.
Mientras que Venom parece estar prosperando y listo para la batalla junto a su nuevo compañero, Dylan está lleno de furia y está decidido a descubrir la identidad del nuevo anfitrión de Venom. Esta situación es precaria para Venom, ya que Marvel ya ha insinuado la posibilidad de que Dylan se transforme en un formidable adversario.
El ciclo del abandono alimenta la furia de Dylan
El viaje de Dylan hacia el rechazo no es una historia nueva; se remonta a su infancia, cuando su madre lo abandonó. Tras el abandono de su madre, su abuelo, que lo acogió, se quitó la vida trágicamente. El momento en que Eddie entró en la vida de Dylan prometió esperanza, pero duró poco, ya que Eddie desapareció durante sus tumultuosas batallas, incluida la infame saga del Rey de Negro. Incluso como Venom, Eddie se ha distanciado previamente de Dylan, creyendo que cortar los lazos protegería a su hijo de las peligrosas consecuencias vinculadas con el simbionte. Todas estas experiencias han marcado profundamente a Dylan, dejándolo sintiéndose aislado y enojado.
Por ahora, Mary Jane Watson y su compañero, Paul Rabin, le han ofrecido a Dylan un lugar donde quedarse, lo que le proporciona una sensación de estabilidad muy necesaria. Sin embargo, a pesar de este refugio, la ira de Dylan sigue burbujeando bajo la superficie. Al carecer de recursos inmediatos para tomar medidas contra quienes le han hecho daño, debe lidiar con la realidad de que sus habilidades simbióticas únicas están actualmente latentes sin un simbionte con el que vincularse. Para complicar aún más las cosas, la intervención de Alchemax tras la Guerra de Venom elimina a posibles aliados de Dylan.
El poder de Dylan: un recurso sin explotar
El legado de Eddie Brock
A pesar de sentirse aislado, Dylan conserva el potencial de un Príncipe de Negro, heredero de los legados de Knull y Eddie Brock. Aunque el Abismo Viviente ha sido erradicado de él, la conexión intrínseca de Dylan con los simbiontes permanece activa. Esto le otorga la capacidad de localizar y comandar simbiontes, lo que sugiere que es solo cuestión de tiempo antes de que encuentre un nuevo vínculo. Una vez que se forme ese vínculo, Dylan Brock resurgirá como Codex , una deidad simbionte capaz de influir fundamentalmente en la existencia de todos los simbiontes. Con habilidades incomparables combinadas con la furia de un adolescente abandonado por su padre, Dylan encarna una terrible amenaza.
Como probablemente no lo sepa el nuevo anfitrión de Venom, pronto podría enfrentarse a la ira de Dylan Brock mientras se embarca en un camino de villanía alimentado por un profundo sentimiento de traición y abandono.
La última entrega, All-New Venom #1 , ya está disponible en Marvel Comics.
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