Explicación del final de ‘A Cure For Wellness’

¿Qué pasa con los cuerpos suspendidos en tubos y las personas sumergidas en baños de anguilas? Si estos escenarios suenan extraños, es porque provienen del mundo de la medicina alternativa que Gore Verbinski explora en su película de terror psicológico, A Cure For Wellness. Ambientada en un spa aparentemente sereno de los Alpes suizos, la narrativa se adentra en todo menos en la tranquilidad. Pero ¿qué pasa con esa conclusión alucinante? Vamos a analizarla.

¿Te sientes mal?

¡No te preocupes! ¡Simplemente dirígete al spa del Dr. Volmer, ubicado en los Alpes suizos, y pronto estarás de nuevo en pie! Esta es la tentadora oferta que se le presenta, y Lockhart, ejecutivo de Wall Street, se siente obligado a aceptar la invitación. Ahora, Lockhart debe recorrer estas inquietantes instalaciones para recuperar a su jefe, pero el resultado para ambos puede estar lejos de ser seguro.

Advertencia: ¡Spoilers a continuación!

No es de extrañar que el fundador del spa, el Dr. Volmer, esté ocultando su verdadera identidad. Lejos de ser un médico benévolo, en realidad es un barón suizo que logró la inmortalidad biológica a través de sus nefastas actividades científicas. Hace dos siglos, el instituto era originalmente el castillo del barón, donde albergaba algo parecido a una obsesión al estilo Juego de Tronos por su hermana. Desafortunadamente, no pudo engendrar los herederos que deseaba con ella debido a su infertilidad. En un intento desesperado por «curarla», el barón recurrió a estrategias siniestras que recordaban al Dr. Frankenstein, realizando experimentos impactantes en los aldeanos locales. Finalmente, los indignados aldeanos se rebelaron, quemaron el castillo mientras atrapaban al barón y a su hermana dentro. En un giro horrible, se apoderaron de la hermana del barón, extrajeron a su bebé concebido con él y lo arrojaron a un acuífero. Trágicamente, la hermana del barón no sobrevivió a esta terrible experiencia.

Pero el bebé sobrevivió.

¿Cómo?, te preguntarás. Las anguilas. Las aguas tóxicas del acuífero facilitan la inmortalidad antinatural de las anguilas, pero el Barón descubrió un método para purificar esta agua filtrándola a través de cuerpos humanos para un consumo seguro. Lockhart casi cayó víctima de este horrible ciclo. Sin embargo, después de liberarse de su confinamiento, descubre las oscuras verdades sobre el Barón y su hija, Hannah, infiltrándose en la oficina de Volmer. En un momento crucial, Hannah se enfrenta a su padre, que busca explotarla, y mientras sus oscuros secretos familiares salen a la luz, ella lo empuja al acuífero, donde encuentra su destino devorado por las anguilas, lo que permite que el dúo huya.

Entonces, ¿qué llevó a Volmer a desear tener descendencia con su propia hija? Él albergaba creencias eugenistas, aspirando a forjar una “raza maestra pura” de seres inmortales, convencido de que el único linaje adecuado para este experimento era su propia línea de sangre. Inicialmente trató de utilizar a su hermana y luego a su hija para producir esta retorcida raza maestra, todo en línea con sus ideales retorcidos. Pero, como quiso el destino, se convirtió en un alimento para sus propias anguilas. *se escuchan risas*

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