El terror existencial es un subgénero fascinante que se adentra en temas de insignificancia, aislamiento y la abrumadora realidad de que la humanidad es una entidad fugaz en un universo vasto e indiferente. Esta riqueza temática lo convierte en un candidato ideal para las películas de terror. Dentro del ámbito del terror, existen numerosos subgéneros que abarcan desde el simple «slasher» hasta el nicho de la «vida en pantalla». El potencial para extraer miedo de varios aspectos de la vida es prácticamente ilimitado, lo que coloca al terror existencial en un espacio único entre lo conocido y lo oscuro, que incluye varias películas aclamadas.
Aunque el existencialismo no es un concepto nuevo, su exploración de aspectos incognoscibles y solitarios de la humanidad ha sido durante mucho tiempo un tema predominante en el arte. El existencialismo, que tiene sus raíces en las filosofías de pensadores de los siglos XIX y XX como Søren Kierkegaard y Friedrich Nietzsche, explora cuestiones profundas sobre la condición humana. Autores prestigiosos como Fiódor Dostoyevski han entretejido temas existenciales en sus narrativas, mientras que la obra de H. P. Lovecraft a menudo encarna esta filosofía a escala cósmica. Otras figuras influyentes, como Jack Kerouac, T. S. Eliot y Franz Kafka, también han contribuido a este discurso, lo que ha dado lugar a una plétora de películas notables que abordan temas existenciales.
Comprender el horror existencial: definición, criterios y orígenes
Un siglo de películas de terror existencialista
Si bien el terror existencial carece de una definición formal, las películas categorizadas dentro de este subgénero poseen un tono distintivo y a menudo exploran dilemas filosóficos similares. Estas películas inquietantes suelen investigar la experiencia humana, centrándose principalmente en la confusión interna de los protagonistas individuales. A diferencia del terror cósmico, que ahonda en amenazas existenciales más amplias que afectan a la humanidad en su conjunto, el terror existencial a menudo enfatiza la soledad y el miedo existencial, lo que da como resultado una narrativa más sombría.
La naturaleza ambigua del terror existencial hace que sea todo un reto determinar sus orígenes. Muchos sostienen que una parte importante de las películas de terror incorporan de forma inherente temas existenciales. El tropo común de protagonistas que cuestionan su realidad durante sucesos sobrenaturales es un excelente ejemplo. Cabe destacar que la desesperación existencial comenzó a surgir en el terror ya en 1922 con la película Nosferatu , que fue recientemente reimaginada por Robert Eggers, un director conocido por su representación del aislamiento y el terror existencial.
En la sociedad actual impulsada por la tecnología, ha surgido una nueva frontera del horror existencial. En lugar de amenazas cósmicas, la sensación de un vacío inexplorado se esconde en las pantallas de los teléfonos inteligentes y en la influencia omnipresente de Internet. La afluencia casi ilimitada de medios, información y autorrepresentación ha proporcionado a los cineastas nuevas vías para explorar el horror existencial. Películas como Ex Machina reflejan este creciente interés por el género, mientras que otras como I Saw the TV Glow sugieren que la fascinación sigue siendo vibrante y cautivadora.
Películas emblemáticas del género del terror existencial
Pioneros del terror existencial: Lynch, Bergman y Garland
Numerosas películas aclamadas ejemplifican los temas del horror existencial, sirviendo como exploraciones profundas de conceptos filosóficos en lugar de simplemente tocarlos. Ejemplos contemporáneos notables incluyen I Saw the TV Glow , Ex Machina y Melancholia , que continúan las tradiciones establecidas por David Lynch en obras como Inland Empire , Mulholland Drive y Blue Velvet . Además, películas clásicas como El séptimo sello , El bebé de Rosemary y No mires ahora brindan información valiosa sobre la evolución del horror existencial y su recepción entre el público. Para aquellos interesados en sumergirse más profundamente en el reino del horror existencial , estas películas sirven como un excelente punto de entrada.
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